He recibido un e.mail de mi amigo Koldo con un antídoto que salvará mi incuria semántica anglosajona y, de seguro, me hará sentir bastante mejor. La receta es de Pedro Subijana y la hurtó y saboreó en Akelarre, donde sólo el paisaje merece la pena.
Ingredientes para cuatro personas:
- 4 lomos de bacalao, previamente desalado - Unos recortes de bacalao para hacer un pil pil - 1 cebolla blanca - 2 dientes de ajo - otro diente para el pil pil - 1 hoja de laurel - 1 cucharadita de pimentón dulce - 1 cucharadita de pimentón picante - ¼ de litro de caldo del bacalao - 4 huevos duros - 9 cucharadas de aceite de oliva virgen extra - 1 trozo de guindilla roja seca - 1 cucharada de harina de trigo - 1 copa de Fino de Jerez.
Elaboración:
Una vez bien desalado el bacalao, se escurre bien, y se seca con papel absorbente. Se reserva. Se pone aceite en una cazuela de barro, y se sofríen la cebolla y los ajos, finamente picados. Se añade el laurel.
Se cortan los lomos de bacalao en dos, de manera que salgan ocho filetes. Se pasan por harina, y se incorporan a la cazuela de barro, balanceando ésta, con ambas manos. Una vez que esté hecho el bacalao, por un lado, se le da la vuelta, y se espolvorean sobre él, las dos clases de pimentón. Se añade el Jerez. Se vierte por encima el caldo, y se pone a hervir a fuego muy suave. Se cuecen, enfrían y se pelan los huevos duros, y se reservan.
Del pil-pil: Se pone aceite de oliva en una cazuela pequeña, con la guindilla roja, y un diente de ajo aplastado. Se calienta poco a poco, hasta que el ajo, tome un bonito color dorado. Se deja templar, y se incorporan los recortes de bacalao. Se liga como si fuese un pil- pil, a base de movimiento, y se pasa por el chino.
Finalmente, cuando el bacalao lleve unos minutos cociendo a fuego suave se incorpora el pil-pil a la cazuela. Se colocan los huevos duros, cortados en rodajas, alrededor del bacalao; se deja un par de minutos más, y se sirve caliente...
Dice que no son las tortitas de bacalao que reseñaba en este blog, pero asegura que tras dar cristina sepultura al plato, miras al mundo con menos odio, y hasta casi lo justificas... Gracias Koldo (Fuente de la imagen: sxc.hu).